30 agosto, 2007

Porque el mundo es injusto, chaval

Cada mañana entraba a la escuela de periodismo esgrimiendo una mirada repleta de algo incómodo de ver para quien tuviera ganas de mirarlo a los ojos. Se caracterizaba por hacer gala de un humor fastidioso y de un cinismo soberbio que lograba que los alumnos no pudiéramos tolerar su presencia.
El primer día de primer año, entró al aula y disparó:
- La mitad de ustedes no va a llegar a tercer año.
Eso fue suficiente para que yo decidiera nombrarlo persona no grata dentro de mi mundo particular; nunca me convencieron las historias de profesores exigentes que son crueles sólo en apariencia y que el alumno descubre, al final de su existencia, que aquel maestro gruñón le dejó una gran lección de vida. Deduzco que él sí creía en esas historias, porque se esforzaba cada día en ser más desagradable que el día anterior.
Si en los exámenes merecíamos un siete, él nos calificaba con un seis. Cuando le preguntamos por qué hacía eso, contestó:
- Porque cuando empiecen a vivir van a ver que el mundo es injusto, y quiero que estén preparados.
En esa ocasión tuve que recurrir a mi instinto de animal social para no escupirlo. Tal vez él ignoraba que la escuela de periodismo formaba parte del mundo.

Una vez entró al bar de la esquina de la escuela. Yo estaba sentada tomando un café y leyendo el diario. Él me vio, me dijo hola y luego hizo una mueca que, deduje, debía ser su modo de sonreír cuando su sonrisa estaba libre de ironía. Se sentó en una mesa, pidió su café y abrió su diario. Imagino que al verme en su mismo bar tomando su mismo café y leyendo su mismo diario, decidió favorecer mi imagen de estudiante que no sabe nada de las injusticias del mundo. Nunca lo vi tan humano como aquella vez, pero la visión duró lo que un café en un pocillo: al día siguiente volvió a ser el mismo hombre de mirada incómoda.

Por fortuna y contra sus creencias, vengo viviendo desde antes de que a él se le ocurriera enseñarnos con sus heroicas injusticias. Gracias a eso pude comprobar que hay profesores que califican con un siete si eso es lo que el alumno merece.

30 Comments:

Blogger Batsi said...

Yo siempre tuve buenos maestros. No sé si fue suerte pero me alegro.

Yo en tu lugar le hubiera dicho lo que se merecía...

30/8/07, 4:11 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

¿Sabes Gilda? Si vivieras en una ciudad pequeña, te daría tiempo a ver a muchos de esos profesores, que no maestros, paseando solos por la calle y tragándose saludos negados.

30/8/07, 6:36 p. m.  
Blogger Letra said...

Conozco a varios profesores así, cada vez estoy más convencida de que, bajo esa apariencia recia y cínica, sólo intentan ocultar el miedo y la inseguridad que sienten.

30/8/07, 7:25 p. m.  
Blogger JuanMa said...

Sí, el mundo es injusto...

... Porque hay gente muy tonta.

Besos, Gilda.

30/8/07, 7:28 p. m.  
Blogger Sandra Becerril said...

Nunca falta profesores así... tu historia me recordó a uno que yo tuve, coincidentemente, de periodismo... y creo que con esa actitud, quieren hacer creer que son los más temidos, los más fregones, los que recordaremos siempre... y no

besos

30/8/07, 7:55 p. m.  
Blogger Horacio said...

haceme acordar que te diga algo.

30/8/07, 7:58 p. m.  
Blogger Marión said...

Hola!, llegué aquí desde el blog de Nausicaa ... estaba leyendo tu entrada sobre los profesores y me recordó a varias personas ... yo estudio Derecho y no sé como será allá en Argentina pero, al menos aquí en Chile, las facultades se caracterizan por la mala evaluación... nunca olvidaré el siguiente episodio, protagonizado por mí cuando perseguí a un profe de la escuela que me puso un 4 y tanto (la nota máxima es un 7):

-Profesor, profesor!!
-Dígame
- Quería hacerle una pregunta respecto al certamen
- ¿A ver?
- Lo que pasa es que no entiendo qué es lo que está mal en estas preguntas que usted corrigió...
- (mirando la hoja) Mmmm... sí, sí ...esto está bien y ésto .. a ver, sí, también ...
- ¿Y bien?
- No, están bien ...

Y, sin decir nada más, se fue!!!

Me he quedado varias veces así ... creo ya me acostumbré, jeje...

En fin, c'est la vie...

31/8/07, 12:37 a. m.  
Blogger Soy ficción said...

Me cuesta ver a los profesores como personas reales, como iguales. Como a los padres supongo, son de otra categoría. Y yo he sido profesora… Creo que para enseñar no hace falta ser la peor pesadilla de tus alumnos, basta mantener una distancia profesional adecuada y por supuesto ser justo.

El mundo es injusto porque lo hacen así, no quiero participar en la generación de una realidad que no me gusta, no quiero enseñar a mis alumnos a ser injustos.

31/8/07, 5:17 a. m.  
Blogger Luigi said...

Yo tuve un profesor que el primer día de clase nos expuso las reglas de forma contundente. Dijo que el 10 era la perfección, y que por tanto sólo merecedor de Dios. El 9 se lo reservaba para él, que para eso era el profesor y que por tanto el que más sabía de de todos los presentes. El mejor de los estudientas tendría un 8, y los demás del 7 para abajo.
¡toma castaña!

31/8/07, 5:50 a. m.  
Anonymous Anónimo said...

Yo tenía un profesor similar en la facultad, que el primer día entró y dijo que de allí no iba a aprobar más del 20%. Luego, un día fui a verlo a su despacho (donde no solía ir nadie a verlo) y me recibió con una simpatía inusitada, algo fuera de lo normal. Después me enteré de que a las chicas que iban a su despacho les proponía ir a la cafetería y otros conatos de cita.
El pobre hombre estaba falto de cariño.

31/8/07, 6:53 a. m.  
Blogger Bambu said...

En realidad ha conseguido ser el profesor sobre el que has escrito este post, igual lo único que quiere es dejar huella, aunque sea mala...

31/8/07, 7:16 a. m.  
Blogger malditas musas said...

Es que es difícil enseñar cuando no se ha aprendido... LA impotencia frente al mundo, su indefención, lo han convertido en un militante activo de la injusticia. En el fondo es resignación frente a un mundo contra el que no pueden, no?

un beso
Musa

31/8/07, 7:51 a. m.  
Blogger Isabel Burriel said...

Nunca he entendido el comportamiento cínico y tirano de algunos profesores. En verdad parece que aprovechen su situación para comportarse como son realmente lo cuál es una verdadera pena.

31/8/07, 7:52 a. m.  
Blogger Madame Vaudeville (Chus Álvarez) said...

Me ha hecho recordar una anécdota similar de mis tiempos de estudio, ma belle "mirona".
En una ocasión un relato corto, escrito por mí, viajó de aula en aula como modelo de buena redacción, creatividad y estilo. En el momento de recibir las calificaciones, un simple "bien" fue toda la nota. Otros compañeros, siempre mediocres, repletos de faltas ortográficas y faltos de imaginación, obtuvieron notables y sobresalientes.
Por qué- pregunté.
Porque has hecho lo que debías y está bien- me respondió- y como ellos siempre lo hacen mal pero están mejorando, hay que reconocérselo.
Vie de chien!

31/8/07, 12:49 p. m.  
Blogger TORO SALVAJE said...

Creo que se equivoca en no poner la nota justa, pero prefiero un profesor así, que no los profesores colegas, enrrollados, que estan en la onda, o sea que no asumen su rol, éstos no me gustan nada.

31/8/07, 1:19 p. m.  
Blogger el nombre... said...

HOY ESTOY CON POCO TIEMPO...PERO EN EL FINDESEMANA, PASO A LEERTE...

VENGO DEL BLOG DE "ELANONIMOSOY", Y SU ESPOSA ESTÁ MUY ENOJADA, CELOSA, Y ÉL A PUNTO DE CERRAR EL BLOG.
¿SI TE DAS UNA VUELTITA Y TRATAMOS DE MEJORAR LAS COSAS? TODO SEA POR UN AMIGO!!!!

SI SUPRIMIS ESTE COMMENT, MEJOR! ¿NO?

31/8/07, 3:46 p. m.  
Blogger NoSurrender said...

El mundo es lo que hacemos nosotros que sea. Nosotros somos el mundo. Así que, hagamos caso al Sabina y juguémonos la boca.

Volvamos a la consigna del 68. ¡seamos realistas: pidamos lo imposible!

31/8/07, 4:49 p. m.  
Blogger Lágrimas de Mar said...

ese profesor tuyo deb�a ser un elemento al parecer
un beso

l�grimas de mar

31/8/07, 6:17 p. m.  
Blogger Princesa Dariak said...

Profesores, personas con cargos importantes, jefes... hasta padres, menosprecian y desaniman a sus aprendices, hijos, empleados, es parte del abuso del poder en todos los àmbitos del sistema.
El mundo en general es injusto, pero uno debe serlo? estoy segura que no. Un verdadero maestro "no es parte de este mundo"...

abrazos de luz.

31/8/07, 8:38 p. m.  
Blogger botas de agua said...

allá va la polémica botas:
yo creo que el tema es que hay desgraciados e impresentables en todas partes. pero en según que profesiones, destacan más, porque tienen más contacto con nosotros. es decir: yo no sé cómo son los abogados o los veterinarios; primero porque no traté con ninguno de ellos, segundo porque me cuestan las generalizaciones.
los que más contacto tienen con nosotros, si os fijáis, suelen cargar con el muerto: médicos, profesores, funcionarios de la administración, asalariados de banco... yo creo que el hombre era así y punto. ¿que quizás su profesión requiera de otras habilidades sociales? el problema lo tiene, pues, el sistema educativo que le adjudicó la plaza. la última vez que un profesor faltó al respeto a una alumna en medio de la clase (la chica hablaba con su compañera y él le replicó: "señorita, usted debe haber ido a un colegio de monjas, porque responde al perfil de reprimida y amargada") me levanté y me fui. de esto hace diez años. el respeto es sagrado. para todos. profesores, médicos, jefes, o quien quiera que sea. nadie tiene derecho a faltar el respeto a nadie.
dicho esto, as usually, me reí mucho con la entrada y con el profesor de luigi.... jajajajajaja

1/9/07, 2:06 p. m.  
Blogger MAYA said...

Huy mi querida Emperatriz...si me habrán tocada de esos maestros en cantidades industriales es poco. Siempre adustos y con esa mirada que nos hacían temblar. Nunca conformes a pesar de todo el efuerzo y la vida que uno le ponía a los trabajos. Muchas veces eran los matasueños. Pero tengo que confesarte que dentro de todos lo que me tocaron y que hacían este juego de profesor de película gringa, tuve uno del que si aprendí mucho y del cual me enamoré porque si me exigía a rabiar y me confrontaba conmigo misma. Hoy es un gran amigo y cuando le digo lo malo que era, se ríe y me dice: "Mirate, en alguito te ayude". Yo lo miro y ya sabes por donde lo mando, como se dice en mi país a "freir monos". Pero bueno, son pocos los que realmente lo hacen con justa causa.

Un beso,

Maya

1/9/07, 2:56 p. m.  
Blogger Clarice Baricco said...

La autoestima tan baja de ciertos docentes provocan que uno les demuestre lo contrario.
Superaste al maestro, eso ni dudarlo.

Besos

1/9/07, 3:00 p. m.  
Blogger Mandarina azul said...

Tu profesor ha de ser primo hermano de otros profesores que yo me sé... Por fortuna de todo hay en la viña.

(Qué feas son las sonrisas-muecas).

Apapachos dobles, Gilda.

1/9/07, 8:18 p. m.  
Blogger Índigo said...

Sí, haberlos haylos. En Filosofía del Derecho nos espetó el filósofo "aún están a tiempo de dejarlo"; eso era el último año, en 5º... pero, estirado y distante, no era tacaño al calificar, aunque en sonrisas, buff, creo que ni una le ví.
Saluditos

2/9/07, 8:22 a. m.  
Blogger Churra said...

No creo en los Mister Chipss (no me acuerdo como se escribia el nombre de esa maravillosa peli " Adios Mister Chipss, qe pronunciaba yo,
joper , cada vez soy menos romantica . Es horrible esto .
Un beso

2/9/07, 3:53 p. m.  
Blogger MALEFICABOVARI said...

De esos conocí unos cuantos, me rebelé contra ellos, no sirvió de nada. Con el tiempo aprendí que sus miradas estaban gastadas de vivir vidas feas, y que transmitían tan sólo ese poso que queda en el corazón cuando todo te salió del revés. Y por fin comprendí aquella actitud, y sentí una lástima inmensa, porque para mi, siempre serán unos perdedores, la vida es demasiado bella para ajustarle las cuentas tan pronto.
APAPACHOSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSS DULCES PARA TI, REMONA¡¡¡

2/9/07, 6:47 p. m.  
Blogger Unknown said...

muy injusto.....el que no tiene padrino, no se bautiza.
Besos!

2/9/07, 9:16 p. m.  
Blogger La Menina de la Reina said...

siempre ha habido y siempre habrá ese tipo de profesores prepotentes que se creen que lo tienen todo sabido y no aceptan que puedan estar equivocados en sus acciones

un kiss

4/9/07, 9:58 a. m.  
Blogger el nombre... said...

Creo que todos, o casi, tuvimos profesores así, máxime cuando nos toca vivir en sociedades de lo más injustas.
Sumarse a la injusticia en pos de ayudar al otro a "adaptarse" a ella es desleznable.

Un beso

9/9/07, 3:47 p. m.  
Blogger Elios said...

pero si me provocan yo también se jugarme la boca... yo también se besar.

20/9/07, 6:31 p. m.  

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